Se acerca el fin del tercer trimestre, es momento de rendiciones
Tengo la misma sensación con las clases que estoy dando, en las que puedo investigar a la par de las personas que asisten y entablar un diálogo curioso y súper estimulante. Eso me dí cuenta ya que por dinero acepté unas horas para reemplazar a una amiga y medio que me arrepiento. Fue lindo ver que el sueldo se abultó y ya estoy pensando en comprar una esfera de luces que responde a estímulos sonoros o una barra de entrenamiento para poder rediseñar una rutina que pueda hacer en casa y no estar tan atada a los horarios del club.
Fui a remar varias veces y me hice muchas ampollas, vi a una garza acecharme en la laguna y cagar al lado mío en señal de defensa del territorio. Sumé el trabajo aeróbico y se refleja en mi cuerpo y aire. Y cada vez que me sentí mal o apesadumbrada por el estrés salí al río, recibí la tibieza del sol del otoño y aspiré enormes bocanadas de aire fresco, oxigenado y liviano.
Ya estoy en un buen estado cero para empezar a ensayar. Indagar sobre los procesos creativos de músicos me ayuda mucho para pensar en la obra, no tanto en la conferencia performática. Creo que ya tengo suficiente material para redactar una y presentarla. Apareció la opción de Barcelona y me resulta muy atractiva pero no puedo dejar de percibir que en Argentina las cosas se están poniendo cada vez más difíciles y no sé si podré costear algo así.
Cuidar la creación del propio arte no sólo tiene que ver con imaginarios y seguridades o autoestima. También los factores económicos y sociales me atraviesan. El otro día volviendo tarde en el tren de dar clase se sentó un tipo al lado mío y empezó a masturbarse, los de seguridad se pusieron más gedes que ese colifa que ante el grito y el reto se bajó del tren. Siento todo tenso y las respuestas me resultan exageradas, como resultado de un hartazgo y haber llegado a un punto en el que lo aprendido ya no da resultado. En ese momento vuelvo a mi mundo interior, a cantar y jugar con mi cuerpo y mi voz y me rescato, tomo coraje para volver a salir al día siguiente.
Si la cultura es atacada por la economía, cada vez estoy más convencida de que es para que nos deprimamos, asustemos y acatemos órdenes.
Dolor de garganta producto del cansancio al integrar en el trabajo vida y arte e invsetigación todo.
Rever horarios porque los traslados también me agotan, aunque sirven para conectar con la música y los sonidos que quiero para mi perfo.
La salida al rio puede ser tanto entrenamiento como ensayo o ambas cosas a la vez. llevar celular y soporte de brazo para tomar fotos y auriculares por si quiero grabarme